Una de las tareas más complicadas que deben afrontar las familias adoptivas es hablar sobre los orígenes y la historia previa con sus hijos/as. Tanto las familias como los/as hijos/as lo consideran complicado debido a 
que surgen miedos por ambas partes.
Los padres tienen miedo, por un lado, de dañar a sus hijos/as, removerles un pasado difícil y doloroso o recordarles su experiencia de abandono, y por otro lado, temen remover duelos propios no resueltos del todo o despertar en los/as hijo/as deseos de volver con su familia de origen. Los/as hijos/as tienen miedo de dañar a sus padres, de hacerles creer que no les quieren, temen que no sea adecuado hacer ciertas preguntas. Sin embargo, al mismo tiempo ambas partes reconocen la importancia de estas conversaciones y los profesionales indicen en ello, no sólo como beneficio para los padres adoptivos y para la dinámica familiar (más comunicación, más cohesión familiar, más confianza), sino también para el desarrollo del niño/a.
Gracias a una adecuada comunicación y a un adecuado clima de apertura comunicativa se ayudará al desarrollo de la identidad del hijo/a, su autoestima, sus relaciones familiares, sus relaciones con los iguales y principalmente, le ayudará a ir elaborando el duelo por la separación y el abandono que sufrió en el pasado, pudiendo dar sentido a su historia o compartir sus sentimientos de incertidumbre, enfado o indignación. Dada la importancia de esta comunicación, en el equipo Deusto Family Psych de la Universidad de Deusto hemos creado un programa de intervención grupal para padres y madres adoptivos con el fin de tratar estas dificultades y compartir experiencias relacionadas con las conversaciones acerca de la historia pasada o el origen de los/as hijos/as.
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